Insaturbo -compañia especializada en el renovado y reciclado de neumáticos- se ha puesto en pie de guerra tras el desastre del incendio de Seseña para reivindicar este producto como “fuente de materia prima de primera calidad” y no como residuo. Según la empresa, “el reciclado de los neumáticos fuera de uso proporciona una solución ecológica, segura y ecosostenible” a este tipo de problemas.
Desde 1988, Insaturbo fabrica más de medio millón de neumáticos renovados para turismo, 4×4, camioneta y camión que se exportan a más de 40 países. A diario, su planta de Aspe (Alicante) recibe más de 5.000 neumáticos usados para su reciclado. De éstos, el 10 por ciento se renuevan para duplicar su vida útil mientras que el 90 por ciento restante pasan a convertirse en materia prima lista para reutilizar. Con estas cubiertas se fabrican losetas de seguridad para parques infantiles, césped artificial, suelas, mangueras, aislantes acústicos para viviendas e, incluso, el acero que contienen se utiliza en la industria automovilística o en cuberterías.
Gracias a estas prácticas se ha evitado la emisión a la atmósfera de más de 7 millones de toneladas de CO2, lo que supone el ahorro de más de 2.800 millones de litros de petróleo. Por cada neumático de turismo renovado por Insaturbo se dejan de emitir 32’8 Kg de CO2 y se dejan de consumir 10,5 litros de petróleo por unidad.
