Continental -compañía dedicada a la fabricación de neumáticos y soluciones globales para automoción- ha anunciado la apertura de una nueva planta en San Luis de Potosí (México).
Tras un año de construcción y una inversión de más de 153 millones de euros (167 millones de dólares), la nueva fábrica estará destinada a la producción de frenos hidráulicos, que integrarán soluciones para su accionamiento, modulación y presión de frenado, así como proveer información al sistema electrónico y su interfaz con sistemas del vehículo.
Según un comunicado lanzado por la división de Continental en México, las instalaciones contarán con 120.000 m2 de los que 23.000 se destinarán a la fabricación de productos. En total, Continental llegará a emplear a 900 personas en 2020 cuando se encuentre funcionando al 100 por 100.
“Esto apenas es el inicio de una gran historia de éxito que estoy seguro vamos a construir juntos por que este gran equipo está para conseguir grandes cosas”, reconoció el director de la nueva planta de Continental, Alonso Schiaffino, durante la inauguración.
El comunicado hace hincapié en que “esta inversión, refuerza la presencia de Continental en la región al sumarse a las Plantas de ContiTech y de llantas en San Luis Potosí y a 15 plantas, más dos centros de Investigación y desarrollo en México”, de modo que la compañía alemana deja clara su apuesta por “el talento mexicano, al crear fuentes de empleo de alto valor competitivo a nivel mundial”. De esta manera, Continental se desmarca de las decisiones tomadas por empresas como Ford, que abandonó la construcción de su nueva fábrica de automóviles en San Luis de Potosí tras la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump.