Ante la aparición de las tormentas de verano con la coincidencia de constantes desplazamientos de conductores, la Asociación Nacional de Distribuidores e Importadores de Neumáticos (ADINE) alerta sobre el riesgo de conducir en estas circunstancias y aconseja sobre cómo evitar el riesgo de sufrir aquaplaning.
El aquaplaning se produce cuando circulamos sobre carreteras muy encharcadas, lo que puede provocar la pérdida de adherencia de las ruedas con el asfalto y el control del vehÃculo, incluso cuando los neumáticos se encuentran en buen estado.
AsÃ, ADINE comparte varios consejos a seguir durante una tormenta o gota frÃa:
– En primer lugar, hay que mantener la calma y circular con más precaución de lo habitual.
– Moderar la velocidad y conducir de forma muy suave, es recomendable no superar los 70-80 km/h y levantar el pie del acelerador para decelerar suavemente
– Evitar frenazos, ya que de lo contrario, cuando los neumáticos entren en contacto con el asfalto pueden quedar bloqueados, lo que puede suponer una pérdida del control del vehÃculo. Para ello, debe agarrarse el volante con firmeza y no frenar ni antes ni durante el paso del agua.
– Evitar cambios bruscos de dirección, ya que si realizamos movimientos bruscos del volante el aquaplaning puede agravarse, por lo que si circulamos por una vÃa recta se debe evitar mover el volante, mantenerlo firme y disminuir la velocidad de forma paulatina para no perder el control. En cambio, si esto ocurre en una curva, lo más recomendable es hacer un giro suave para evitar perder el control total del vehÃculo.
Sin embargo, ADINE recuerda que para prevenir el aquaplaning lo más apropiado es mantener los neumáticos con la presión y la profundidad del dibujo adecuados, ya que unos neumáticos sin la presión o profundidad adecuada son más propensos a perder adherencia fácilmente.