La nueva norma entrará en vigor a partir del 20 de mayo de 2018 y permitirá, entre otros, la libre elección de estación ITV cuando el resultado de la inspección sea desfavorable.
La Asociación Nacional de Comerciantes de Equipos, Recambios, Neumáticos y Accesorios para Automoción (ANCERA) ha anunciado su satisfacción ante el nuevo Real Decreto que establece los requisitos que deben cumplir las ITV.
La nueva norma, aprobada por el Consejo de Ministros el pasado 20 de octubre, tiene como misión “garantizar la mejora de la seguridad vial y el medioambiente manteniendo la imparcialidad, independencia y objetividad de los operadores del diagnóstico del vehículo”, gracias al trabajo realizado durante años por la organización, que ha defendido su posición ante la Comisión Europea y ante el Ministerio de Industria. Desde ANCERA apuntan que, en caso de haber sido negativa, esta resolución habría perjudicado gravemente a los 40.000 talleres independientes que cada día abren la persiana en nuestro país.
“Debemos recordar que la gran mayoría de talleres multimarca en España son pymes y micropymes con una media aproximada de 3,5 trabajadores de modo que una posible liberalización de las ITV sería devastadora para estos ellos”, ha explicado el Presidente de ANCERA, Miguel Ángel Cuerno. Según cálculos de la patronal, los puntos de venta podrían perder hasta un 20 % de sus operaciones al no poder acometer la inversión en bienes de equipo y maquinaria necesaria para realizar la inspección de vehículos que, en cambio, sí podrían llevar a cabo los concesionarios.
El Real Decreto entrará en vigor el 20 de mayo de 2018 y contará con una serie de beneficios para el consumidor como la elección libre de estación ITV cuando el resultado de la inspección sea desfavorable. Además, ofrecerá la posibilidad de adelantar hasta un mes la fecha de la ITV sin que varíe la fecha prevista para la siguiente. El nuevo Reglamento pone el acento sobre la electrónica de los vehículos y, por ello, exigirá a las estaciones de ITV disponer de herramientas de lectura de diagnóstico que se conectan con los ordenadores de a bordo de los vehículos con el fin de inspeccionar los sistemas electrónicos y mejorar los controles sobre las emisiones.
Finalmente, ANCERA destaca la importancia que esta norma va a tener para los fabricantes de equipos de diagnosis, que serán obligatorios en las estaciones ITV. Los talleres también se beneficiarán de esta exigencia debido a que verán incrementadas las operaciones por averías en los sistemas electrónicos producidas que serán detectadas durante las inspecciones. Además, la organización entiende que la obligación de disponer de herramientas de lectura de diagnóstico conectadas a los ordenadores de a bordo del vehículo no puede ser concebida con el posible cierre del conector OBD.