La Confederación Española de Talleres (CETRAA) ha organizado campañas informativas a través de sus asociaciones para informar sobre las opciones que tiene el taller ante las prácticas abusivas de las compañías aseguradoras. Esta vez, a raíz de la iniciativa de los servicios jurídicos del GREMI (CETRAA Barcelona), se profundiza en el derecho de elección de taller por parte del asegurado o perjudicado en un accidente y la necesidad de poder defenderlo de manera activa.
En el caso de que la empresa aseguradora no envíe un perito a un taller por el hecho de no ser concertado, el taller puede realizar el encargo del cliente si este está de acuerdo, ya que el propietario o asegurado tiene derecho a elegir dónde reparar su vehículo.
CETRAA recomienda al taller contratar un perito de confianza si la compañía no perita en ocho días, establecidos por la Ley de Contrato seguro, y se cuenta con el consentimiento del asegurado. A partir de ahí, trasladar el informe a la compañía y que esta repare en base a esa peritación.
Según el artículo 18 de la Ley de Contrato Seguro, “si el asegurado lo consiente, la aseguradora puede sustituir su obligación de pagar la indemnización por la reparación o reposición del objeto siniestrado (el vehículo)”.
Por otro lado, si el asegurado no es el culpable del accidente, la renuncia o consentimiento del cliente que aparece mencionada en el artículo 18 de la Ley de Contrato Seguro no se aplica, por lo que el taller puede contratar a un perito y obligar a la aseguradora del vehículo culpable y responsable directa del pago de la indemnización . Con lo cual, tendría que costear la reparación del daño en función del precio/hora de tablilla y conceder prioridad, según establece el Decreto de Talleres, a piezas originales y nuevas en la reparación siempre que no supongan un enriquecimiento injusto para el usuario perjudicado sin culpa.
“El usuario de seguros debe ser consciente de su derecho a la elección del taller y debe hacerlo valer. De igual manera, debe relativizar el crédito que concede a las llamadas telefónicas de las aseguradoras con argumentos para llevar su vehículo a reparar a otro taller que le supondrá un menor coste a la propia aseguradora, pero que no implica un mejor servicio para el asegurado”, afirma Rogelio Cuesta, vicepresidente primero de CETRAA y responsable de la Comisión de Aseguradoras.
