Ante las informaciones aparecidas en diferentes medios
relativas a la campaña de inspección desarrollada por la Guardia Civil conocida
con el nombre de “Talleres Mecánicos”, la
Federación Española de Empresarios Profesionales de Automoción (CONEPA) ha
pedido respeto a la profesionalidad y el esfuerzo de la gran mayoría de los talleres de reparación y, por supuesto,
de sus asociados.
CONEPA carga además contra Ganvam –Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor– y Juan Antonio Sánchez
Torres, su Presidente, por su “irresponsabilidad extendiendo la alarma y poniendo al conjunto
del sector en el punto de mira de la opinión pública”. La Federación no se explica cómo es posible que lejos
de explicar las cifras resultantes de las inspecciones de la Guardia Civil, el Presidente de esta asociación insista en declarar un mayor número de talleres ilegales del registrado.
Sánchez Torres ha mantenido que el número de talleres que
actúan al margen de la legalidad asciende a 10.000, una cifra que dista de la
ofrecida por CONEPA que habla de 238 talleres, los cuales cesaron en su
actividad. Además, la Federación apunta que: “Aunque se proyectasen los datos
referidos a talleres ilegales sobre el total del censo de talleres -47.000
según el INE- el número de ilegales ascendería a 1.700, muy lejos de los 10.000
mencionados”.
La interpretación de los datos de la reciente campaña de
inspecciones de la Guardia Civil es, en opinión de CONEPA, denigrante para la imagen del taller porque
daña su reputación ante el cliente. Según la Federación, los datos que se han
manejado mezclan conceptos con titulares que distorsionan la realidad y generan
una enorme confusión y desasosiego entre los profesionales además de alarma
social entre los usuarios, extendiendo una sombra sobre el sector que da lugar a
un clima tóxico y de desconfianza, un agente nocivo para cualquier negocio.