El Grupo Bridgestone ha querido aportar su grano de arena tras los desastres causados por los huracanes Harvey e Irma en Estados Unidos con la donación de un millón de dólares a la Cruz Roja del país americano.
El dinero se destinará a la recuperación y reconstrucción de zonas afectadas en Texas, Louisiana, Georgia, Carolina del Sur y Florida, estados clave en los que Bridgestone tiene miles de empleados, clientes y socios comerciales.
“Estamos orgullosos de emplear nuestros recursos para apoyar a las comunidades afectadas y ayudar a reconstruir sus vidas. Y, sobre todo, estamos orgullosos de que nuestros compañeros de equipo hayan sido tan generosos a la hora de apoyar las necesidades de los compañeros de trabajo que se han visto afectados”, ha dicho Chris Karbowiak, Director Administrativo de Bridgestone Americas.
Además, también se han movilizado 400.000 dólares de los denominados Fondos Internos de Asistencia al Empleado de Bridgestone Américas, un depósito formado por las donaciones anuales de los empleados para causas como ésta y que será utilizados para que los empleados de Bridgestone que lo necesiten puedan obtener una vivienda temporal, materiales de contrucción o enseres básicos como alimentos o agua embotellada. En la actualidad ya son más de 200 los compañeros que se han beneficiado del apoyo de estos fondos. La huella de Bridgestone en las áreas afectadas de Texas, Louisiana, Georgia, Carolina del Sur y Florida incluye aproximadamente 6.000 empleados en más de 500 tiendas minoristas, muchas instalaciones de fabricación y varios centros de distribución.
El Grupo Bridgestone, que cuenta con presencia en más de 150 países en todo el mundo, cree en “la importancia de establecer relaciones de confianza con las comunidades locales, así como contribuir al desarrollo y apoyo de estilos de vida y educación de las personas en las comunidades locales de los lugares en los que opera”.
