Continental ha iniciado un acuerdo de colaboración con Nvidia, compañía dedicada a la visualización computacional, mediante el que desarrollarán sistemas de inteligencia artificial para vehículos autónomos.
El nuevo proyecto se llevará a cabo a través de la plataforma Nvidia Drive y, previsiblemente, estará disponible en el mercado a partir del año 2021. Esta asociación permitirá la producción de sistemas informáticos de inteligencia artificial para niveles de autonomía que van desde 2 hasta 5 (el máximo), en el que el automóvil no tiene ni volante ni pedales.
Los equipos de ingenieros de ambas compañías trabajarán en conjunto con el objetivo de desarrollar soluciones autónomas basadas en la plataforma Nvidia Drive, que incluye el chip Nvidia Drive Xavier, el sistema operativo Nvidia Drive y el software Drive AV (autonomous vehicle). Por su parte, Continental aportará su experiencia en el campo de los sensores de radar de corto y largo alcance, cámaras multifuncionales, de ojo de pez con visión envolvente y dispositivos LiDAR 3D de alta resolución, así como unidades de control centralizadas para asistencia y automatización.
En un principio, Continental y Nvidia desarrollarán características de manejo altamente automatizadas, que incluyen la percepción de 360 grados y el cambio automático de carril en la carretera, así como la capacidad de unirse en el tráfico sin asistencia del conductor. Además, el sistema integrará mapas HD, permitiendo que el vehículo se localice y proporcione actualizaciones de mapas.
El consejero delegado de Continental, Elmar Degenghart, ha predicho que “el vehículo del futuro será una computadora de detección, planificación y actuación sobre ruedas, que requerirá de la potencia computacional de una supercomputadora de inteligencia artificial”. Por ello, esta alianza con Nvidia servirá para alcanzar “nuevos niveles de seguridad, comodidad y personalización para futuros vehículos”, ha añadido.
Por su parte, el consejero delegado de Nvidia, Jensen Huang, ha reconocido que su compañia cuenta con “todos los elementos clave” que permitirá implementar la IA en la conducción autónomo a un nivel de producción en masa.
En 2016, las ventas de Continental de sistemas avanzados de asistencia al conductor superaron los 1.200 millones de euros y la compañía espera que crezca a 2.500 millones de euros para 2020.