La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) de Estados Unidos ha abierto una investigación en la que ha puesto a Goodyear en el punto de mira. El organismo quiere dilucidar las posibles responsabilidades que pudieron tener los neumáticos de la compañía en accidentes de tráfico con heridos o muertos producidos durante dos décadas. En total, fueron 95 las personas que sufrieron las consecuencias de esta negligencia.
Las investigación, que comenzó el pasado 28 de diciembre, se originó tras varias denuncias de usuarios en las que se aseguraba que el fabricante vendía cubiertas defectuosas. Según explica el diario estadounidense The New York Times, “la acusación sostiene que Goodyear vendió neumáticos para turismos diseñados originalmente para camiones de reparto y fuera de autopista. El modelo en cuestión es el G159 RV, producido entre 1996 y 2003 y del que se fabricaron cerca de 40.000 neumáticos.
De esta manera, la acusación considera que existe un patrón en una serie de accidentes ocurridos entre 1998 y 2015. En todos los casos creen que la ineficiencia de los neumáticos fue el denominador común. Además, según las mismas fuentes, Goodyear habría estado al corriente de la peligrosidad de estos productos, detalle que mantuvieron oculto alegando “secreto industrial”.
Así, cuando el Centro por la Seguridad Vial y la Justicia pidió las primeras explicaciones, la enseña las desestimó, obstruyendo la investigación en curso. Sin embargo, el juez se falló a favor del centro, “defendiendo que la información para el consumidor era más importante que el secreto industrial”.
Tras conocerse la noticia, la compañía ha reaccionado de inmediato, asegurando que tiene una clara predisposición por esclarecer los hechos. El portavoz de Goodyear, Jim Davis, ha explicado en un comunicado que la compañía continúa creyendo que no hay defectos de seguridad en los neumáticos. “Goodyear tiene fuertes controles de calidad, sigue los estándares de la industria en la fabricación de neumáticos y monitorea su desempeño en el exterior”, ha dicho.
Ahora, la NHTSA le pide a Goodyear los datos completos de las reclamaciones y los cambios de producción que realizó con los neumáticos G159. También le pide que describa cómo analiza las reclamaciones por lesiones para encontrar posibles defectos de seguridad con sus neumáticos. Goodyear tiene hasta el 4 de mayo para responder, pero puede solicitar una extensión.
Por el momento es imposible conocer cuántos vehículos montan aún estas cubiertas en Estados Unidos. Sin embargo, Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras ha ofrecido la posibilidad a los usuarios de realizar una inspección gratuita en un vendedor oficial de la compañía.