Inicio / Noticias / ¿Cuántos NFU se necesitan para construir una escuela sostenible?
EDUCACIÓN Y ECOLOGÍA

¿Cuántos NFU se necesitan para construir una escuela sostenible?

Por Tania Alvarez
Hace 3 meses abrió sus puertas la primera escuela pública sostenible de Argentina. Un lugar que ha supuesto 45 días de construcción y cientos de voluntarios de diferentes países comprometidos con este 'proyecto ecológico'.

A finales de abril comenzaba a funcionar la primera escuela pública sostenible de Argentina. Unas instalaciones de 300 metros cuadrados que nacieron a partir del concepto de autoabastecimiento y el empleo sostenible de recursos, materias primeras y materiales reciclados en el municipio de Mar Chiquita (Buenos Aires).

Durante 45 días, cientos de voluntarios procedentes de distintos países colaboraron para dar forma a esta escuela con 2.000 neumáticos fuera de uso, 14.000 latas de aluminio, 2.000 metros cuadrados de cartón y 8.000 botellas de vidrio y plástico. Materiales reciclados con los que este colegio posee hoy en día tres aulas, dos zonas de aseo y dos huertas ecológicas en las que dar cabida a seis decenas de alumnos. Próximamente se sumará una biblioteca, un salón de usos múltiples y una cuarta aula.

La Escuela de Primaria nº 12, ubicada en lo que antes era un terreno que servía a los más peques como cancha de fútbol, simboliza un innovador ‘proyecto ecológico’ ya desde su ideación a cargo de Michael Reynolds. Un arquitecto estadounidense conocido por el diseño y la construcción de ‘casas solares pasivas’ confeccionadas a partir de materiales reciclados y conocidos como “earthship”.

La escuela de Mar Chiquita, además de paredes con neumáticos que han finalizado su ciclo de vida, tiene mesas y sillas hechas con cartón, paredes con botellas de vidrio, cemento y madera. Su diseño solar pasivo permite que a través de la energía solar y la orientación de sus ventanales capte el calor necesario, actuando como sistema calefactor. También tiene dos huertas orgánicas y un sistema de agua de lluvia que abastece a la escuela.

‘Biotectura’

Michael Reynolds da vida a un tipo de arquitectura al que él mismo acuñó el nombre de ‘Biotectura’. Casi media siglo atrás, Reynolds tuvo la idea de compartir sus conocimientos y técnicas a medida que construía  edificios con materiales reutilizados y naturales en muchos lugares del mundo. A esto Reynolds lo denominó en inglés ‘Biotecture’.

Estas viviendas o ‘Earthships’ están hechas con materiales naturales y reutilizados, como botellas de vidrio, latas de aluminio, botellas de plástico (PET), neumáticos, etc. Son edificios autosuficientes que, por tanto,  producen su propia electricidad, recolectan agua de lluvia, tratan aguas residuales y producen alimentos para una dieta saludable.

Scroll al inicio