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La tecnología que levanta el pie del acelerador a los conductores

Levantar el pie del acelerador. Este simple gesto, aún difícil de realizar para una amplia mayoría de los conductores españoles, se va a convertir en una sencilla práctica gracias al Limitador Inteligente de Velocidad (ISA por sus siglas en inglés). Esta nueva tecnología, desarrollada por la marca Ford, cartografía las señales de velocidad a través de una cámara instalada a la altura del parabrisas y adapta la velocidad del coche al límite legal permitido. 0002

El sistema, que anticipa los avances que se producirán en los automóviles en un futuro muy cercano, es opcional para el conductor, quien puede activarlo o desactivarlo antes de comenzar la conducción. Además, una vez activado, el usuario puede desbloquearlo pisando el acelerador con firmeza si así lo desea.

Una de las ventajas indiscutibles de esta novedad es el potencial ahorro en multas pero, la más importante es, sin duda, la reducción de los accidentes de tráfico. La velocidad es uno de los tres principales factores que contribuye a las muertes y lesiones en nuestras carreteras. Por ello, con el Limitador Inteligente de Velocidad podrían reducirse hasta en un 30 por ciento el número de colisiones y un 20 por ciento de las muertes. Según datos de la European Transport Safety Council (ETSC) y la Fundación Mapfre, estos porcentajes corresponderían a 379 personas que podrían salvar su vida anualmente y 1.852 heridos graves que nunca llegarían a sufrir estos accidentes. 

Ambas entidades llevaron a cabo una jornada el pasado 9 de marzo para explicar a los medios las características de estos y otros sistemas de seguridad en colaboración con la Dirección General de Tráfico (DGT). Tras la prueba, los periodistas asistieron a la jornada titulada “El Asistente de Velocidad Inteligente (de Serie en todos los vehículos)”, en la que participaron María Seguí, directora de la DGT y Jesús Monclús, director del área de prevención y seguridad vial de la Fundación Mapfre, entre otros.

El sistema ISA podría evitar multas y salvar vidas si se comercializara de serie. Sin embargo, en la actualidad, sólo se instala en coches de alta gama. Ford ha querido romper esta tónica y, para ello, va a implantarlo en el nuevo Ford S-Max, un vehículo multiactividad que también detectará a peatones que atraviesen la calzada y que frenará automáticamente ante un obstáculo si el conductor no responde a ningún estímulo. Con esta tecnología parece que Kit, el coche fantástico, está cada vez más cerca.

 

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