GANVAM alerta de que la retirada de aceite usado debe ser gratuita para los talleres

GANVAM (Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios) considera que el cobro por la retirada del aceite no es legal. Asegura que “son los fabricantes de aceite los que están obligados a hacerse cargo no sólo de la gestión del aceite usado, sino de la financiación de dicha gestión” en base a los que figura en la normativa vigente que rige la correcta gestión de aceites industriales (Real Decreto 679/2006 y Ley 22/2011).   

Según el presidente de Ganvam, Juan Antonio Sánchez Torres, “no se puede cobrar al taller por la retirada del aceite, ya que, según establece la ley, son los fabricantes de aceites industriales quienes deben hacerse cargo del aceite usado, tanto en el ámbito logístico como en el financiero. En este sentido, es SIGAUS quien financia la recogida selectiva y la correcta gestión de este residuo”. 

Desde Ganvam explican que un taller de mecánica y carrocería puede generar hasta cuarenta tipos de residuos, que se diferencian entre los que tienen valor económico positivo y los que carecen de él, por lo que su gestión resulta engorrosa y conlleva asociado un coste. Por ello, los fabricantes de aceite pusieron en marcha un Sistema Integrado de Gestión (SIGAUS) y también el cobro de una ecotasa de 0,06 euros por cada kilo o, lo que es lo mismo, 0,054 euros por cada litro de aceite nuevo que entra en el mercado. Por lo tanto, “siempre que el aceite recogido garantice su tratamiento estándar el gestor, el recogedor o transportista no podrá cobrar por la retirada, ya que tiene firmado un acuerdo con SIGAUS y será este sistema integrado de gestión quien le pague”, explican.

La patronal dice que cada turismo aporta unos 24 céntimos cada vez que el taller le cambia el aceite, dinero que se destina a evitar el daño mediambiental que produciría una gestión errónea. Este canon -que grava la compra de aceite nuevo, pero no la operación del cambio de aceite usado- debe desglosarse expresamente en la factura que el taller emite al conductor, que es quien asume esta aportación. Las obligaciones del taller serán, por tanto, la correcta separación de los residuos, su almacenamiento, etiquetado y entrega al gestor autorizado pero nunca el pago de esta retirada. A partir de ahí, el trabajo depende de SIGAUS.