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El estado de los neumáticos repercute en la contaminación medioambiental

Por C de Comunicación

Las últimas semanas se han caracterizado por la ausencia de precipitaciones en la mayor parte de España, lo cual ha provocado -sobre todo en las ciudades más grandes- altos niveles de contaminación atmosférica. A la hora de evitar o al menos de disminuir la contaminación todos podemos aportar medidas como, por ejemplo, no acelerar bruscamente, conducir de forma suave, mantener los límites de velocidad, usar marchas largas en la medida de lo posible, no dejar el motor al ralentí cuando el vehículo está estacionado, etc.

En lo que se refiere al neumáticoO.P.E.N nos recuerda que tiene mucha importancia en el medio ambiente. El tipo de neumático que tengamos, su estado y su presión influyen a la hora de contaminar el aire y, tanto el fabricante como el usuario final tienen mucho que decir al respecto. El reglamento 661/2009 establece una serie de requisitos que han de tener los neumáticos en cuanto a resistencia a la rodadura, adherencia en suelo mojado y emisiones de ruido. La finalidad del reglamento es conseguir mayor eficiencia energética, es decir, obtener un menor consumo de carburante con una disminución de resistencia a la rodadura.

Por otro lado, el Reglamento 1222/2009 sobre el etiquetado de los neumáticos define a la etiqueta con la intención de que los consumidores y usuarios queden concienciados a la hora de comprar neumáticos en términos de eficiencia energética, de consumo de carburante, de ruido y contaminación acústica y de agarre en mojado. Los fabricantes, por tanto, producirán neumáticos respetuosos con el medio ambiente y seguros, no obstante, el consumidor va a tener un papel fundamental. Primero, porque ha de elegir qué tipo de neumáticos quiere y cómo de eficiente, y después, porque va a tener que realizar un mantenimiento de ese neumático.

La responsabilidad medioambiental del consumidor es muy importante, el hecho de conducir con una presión inferior a la recomendada, además de provocar diferentes perjuicios en la seguridad activa del vehículo con el aquaplaning, la pérdida de adherencia y la mayor distancia de frenado, hará que nuestra economía se resienta, ya que, el neumático tendrá un mayor desgaste y, sobre todo, consumirá más combustible, lo que perjudicará gravemente al medio ambiente.

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